Ya no se buscan más gerentes, sino "líderes"

Se reemplazó el antiguo concepto de "Gerente" (quien se dedicaba a dar órdenes y a trabajar a puertas cerradas) por el de "Líder", cuyas habilidades son su capacidad de inducción, comunicación y trabajo en equipo.

El líder será esencialmente un "Coach", entendiéndose como aquel que guía, que apoya y, por sobre todo, entiende que su éxito guarda relación directa con el "éxito" del grupo humano que le han confiado. Una condición necesaria para ello consiste en que el estilo de conducción sufra modificaciones, de un estilo "autocrático", a uno netamente "participativo".

El desafío, en nuestra Empresa, es trasladar estos conceptos a la realidad que se desarrolla en los Buques, donde el Capitán, Oficiales y tripulación integran un Equipo de Alto Rendimiento, donde la sinergia y la comunicación fluida entre todos los integrantes resulta esencial para el logro de los objetivos planteados.

Hoy las Organizaciones más que jerárquicas, se establecen en relación a objetivos de proyectos, por eso la "verticalidad" ha quedado desterrada, dando lugar al concepto de "comunicación", que no implica la relación con un jefe o con un asistente, sino poder comunicarse e interrelacionarse con todos los niveles de la organización, pasando de un ámbito de "independencia" a uno de "interdependencia", que implica la dependencia de uno con otros.

Para llevar a cabo este objetivo, se hace imprescindible reemplazar el "cumplimiento" por el "compromiso", haciéndose responsable por los resultados. Lo que requiere tener una visión más amplia, más allá del comportamiento inmediato. Cada vez más la tendencia se orienta a que las Empresas funcionen como equipos autodirigidos, empleados con poder y con visión periférica del negocio. Los conceptos claves serán entonces: Líder, Coach, Participación, Compromiso e Interdependencia, los que conformarán el capital invisible e indispensable para que la organización de desarrolle con éxito.

Las personas aprenden, cambian su conducta en forma duradera para modificar la realidad, modificándose a sí mismas. Las Organizaciones, también. A veces, las organizaciones saben lo que los individuos ignoran. A veces, los individuos saben lo que sus organizaciones ignoran. En este contexto, la única educación posible es aquella que justamente ayude a modificar el contexto.

Toda organización es un sistema y como tal no hay decisiones particulares. Por ejemplo, para aprender a leer y escribir no se entrenan las manos y los ojos, se entrena a la persona. Entender lo que hace, por qué lo hace y para qué lo hace, así puede valorarlo y modificarlo.

Es fundamental agilizar los canales de comunicación, armar planes de carrera, cuadros de reemplazo, capacitación, que hacen que el individuo tenga siempre encendida la llama del involucrarse. Hoy el paradigma sustenta el perfil de un individuo que debe poseer flexibilidad, capacidad de negociación, voluntad de trabajo en equipo y la posibilidad de que puedan delegarle y que él mismo pueda delegar decisiones.

Gustavo Pereyra
Gerente de Flota de Anta res Naviera